Hace un par de años, durante el transcurso de la campaña anual interclubs en la zona central del macizo de Ubiña, un equipo de espeleos localizaron los restos de un lince en un gran estado de conservación. Pasado este tiempo y, una vez formalizados los permisos pertinentes por parte de la Universidad de Oviedo, se procedió a formar un pequeño grupo y ajustar una fecha para la extracción de los restos.
A mediados de Septiembre cinco miembros del interclub, junto con un representante del Parque Natural de las Ubiñas, nos encaminamos hacia la zona alta de la crestería de los Cinchos, donde se ubica la sima C-3 y el yacimiento objeto de estudio. Esta afilada línea de cumbres supone la prolongación más distal de la cumbre de Los Fontanes hacia los Puertos de Agüeria.
Ya en el interior de la cavidad, tras un gran pasamanos exterior que le da acceso, nos dividimos en dos grupos una vez alcanzado el punto de extracción, de modo que un equipo se quedaría recopilando y empaquetando los huesos del lince (según las directrices de los expertos) mientras que otro equipo comenzaría las labores topográficas desde esta localización hasta la entrada a la sima. Decir, que los restos se hallaron a una profundidad de 55 metros en una especie de nicho donde aparentemente se recostó el animal para morir.
Estas operaciones nos ocuparon unas cuantas horas hasta bien entrada la tarde, cuando salimos de la cavidad. A la semana siguiente, los restos fueron entregados al paleontólogo Diego Álvarez Lao, de la Universidad de Oviedo para un estudio preliminar del felino, confirmándonos la especie como lince boreal ("Linx linx") y destacando su estado de conservación (aventurando una antigüedad posiblemente inferior al siglo) y el gran tamaño del especimen. De hecho constató unas medidas incluso superiores a los estandares fijados para esta especie.
Actualmente los huesos se encuentran a la espera de ser trasladados a Madrid para la realización de una serie de ensayos biométricos así como una datación que precise la antigüedad del animal.
A mediados de Septiembre cinco miembros del interclub, junto con un representante del Parque Natural de las Ubiñas, nos encaminamos hacia la zona alta de la crestería de los Cinchos, donde se ubica la sima C-3 y el yacimiento objeto de estudio. Esta afilada línea de cumbres supone la prolongación más distal de la cumbre de Los Fontanes hacia los Puertos de Agüeria.
Ya en el interior de la cavidad, tras un gran pasamanos exterior que le da acceso, nos dividimos en dos grupos una vez alcanzado el punto de extracción, de modo que un equipo se quedaría recopilando y empaquetando los huesos del lince (según las directrices de los expertos) mientras que otro equipo comenzaría las labores topográficas desde esta localización hasta la entrada a la sima. Decir, que los restos se hallaron a una profundidad de 55 metros en una especie de nicho donde aparentemente se recostó el animal para morir.
Estas operaciones nos ocuparon unas cuantas horas hasta bien entrada la tarde, cuando salimos de la cavidad. A la semana siguiente, los restos fueron entregados al paleontólogo Diego Álvarez Lao, de la Universidad de Oviedo para un estudio preliminar del felino, confirmándonos la especie como lince boreal ("Linx linx") y destacando su estado de conservación (aventurando una antigüedad posiblemente inferior al siglo) y el gran tamaño del especimen. De hecho constató unas medidas incluso superiores a los estandares fijados para esta especie.
Actualmente los huesos se encuentran a la espera de ser trasladados a Madrid para la realización de una serie de ensayos biométricos así como una datación que precise la antigüedad del animal.
Enhoabuena
ResponderEliminarGracias! Tu colmena
ResponderEliminarImpresionante! Se sabe algo más? Dónde podría encontrar más datos sobre el tema? Muchas gracias!
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